No puedo ser
humano y permanecer neutral frente a un
mundo en el que tantos humanos son rechazados, oprimidos, marginados o ignorados.
Tengo que elegir mi partido.
Mi
partido es el de los postergados, en contra de todos aquellos que abusan de ellos.
Estoy del
lado de la grandeza y de la dignidad de cada ser humano y en contra de la injusticia de cualquier signo, sea de
derecha o de izquierda, que crea la pobreza, la acrecienta, la multiplica.
Mi patria
es la justicia, en solidaridad con las mujeres y los hombres enamorados de ella
hasta no sacrificar jamás una sola pizca de la misma a ningún partido, a
ninguna ideología, a ninguna religión o no religión.
No estoy
con la justicia oficial de una democracia coja que está trapicheada cada día
por aquellos que tienen la manija, sino con la justicia que otorga a los que no tienen nada los mismos derechos
y el mismo poder que a los que lo tienen todo.
Estoy con
esta justicia que reconoce que la Tierra también tiene sus derechos que son solemnes
y sagrados, y que urgirnos a respetarlos
de verdad es una cuestión de vida o
muerte para toda la humanidad.
Fuera de
la justicia, de una justicia humana, con alma amplia y flexible, compasiva y holística, no tengo ni bandera, ni partido,
ni iglesia ni patria.
Eloy Roy
Bravisimo Che.
ResponderBorrarP`delante pues estoy con vos...